Encontré una joya perdida en internet. No conocía nada de este señor, y me alegra que sea yo y no el mundo el que lo desconoce. Cuando encuentre más cosas de él, las publicaré. Dejo el blog en donde lo conocí y anexo, después del link, un fragmento.
https://habitaciondelaheroina.wordpress.com/2011/08/24/a-mi-tambien-me-busca-la-noche-julio-inverso/
Los que tocan clarines en las ciudades bombardeadas, los que convencieron a las multitudes con su inspiración, los que conversaron tres días sin parar con las cabezas rapadas y luego saltaron al vacío, los que repitieron las palabras cientos de veces hasta llegar a los centros armónicos del lenguaje y hacer saltar la poesía en pedazos, los que se perforaron el cerebro para introducir gloria, ideas científicas y saludos de cumpleaños, los que liberaron a todos los pájaros de los museos y a todas las esporas de los invernaderos, los que abrazaron a sus madres, hermanas y amantes antes de partir a abrazar el mar, los que descubrieron los caminos auténticos en medio de la confusión, los que entregaron su sangre sonriendo, los hombres-faros que se irguieron majestuosos en los mares y en los tiempos, los primeros en señalar el cielo y en ser deslumbrados por él y en pagar por su pureza en la oscuridad para siempre, todos ellos se elevan esta mañana, bocas agrias al despertar, ojos que echan raíces en el espejo, buscando la vida, que trepa, libélula en nuestra sangre.
https://habitaciondelaheroina.wordpress.com/2011/08/24/a-mi-tambien-me-busca-la-noche-julio-inverso/
Los que tocan clarines en las ciudades bombardeadas, los que convencieron a las multitudes con su inspiración, los que conversaron tres días sin parar con las cabezas rapadas y luego saltaron al vacío, los que repitieron las palabras cientos de veces hasta llegar a los centros armónicos del lenguaje y hacer saltar la poesía en pedazos, los que se perforaron el cerebro para introducir gloria, ideas científicas y saludos de cumpleaños, los que liberaron a todos los pájaros de los museos y a todas las esporas de los invernaderos, los que abrazaron a sus madres, hermanas y amantes antes de partir a abrazar el mar, los que descubrieron los caminos auténticos en medio de la confusión, los que entregaron su sangre sonriendo, los hombres-faros que se irguieron majestuosos en los mares y en los tiempos, los primeros en señalar el cielo y en ser deslumbrados por él y en pagar por su pureza en la oscuridad para siempre, todos ellos se elevan esta mañana, bocas agrias al despertar, ojos que echan raíces en el espejo, buscando la vida, que trepa, libélula en nuestra sangre.