En España el Barroco encuentra un terreno particularmente fértil. Después del descubrimiento y conquista de América, los galeones españoles regresaron cargados de oro y plata, principalmente. Aunado a esto, inició el secuestro de africanos para que trabajaran en las minas novohispanas. Durante los años siguientes, España logró consolidar la más grande armada marítima de aquellos años: La Grande y Felicísima Armada o La Armada Invencible.
Desde algunos años antes, sin embargo, las cosas iban decayendo. Es cierto, los galeones españoles que llegaban estaban cargados de oro, pero este oro sólo infló los mercados peninsulares: las cosas elevaron su precio al tiempo que los campos y otros sistemas de producción iban en picada; esto se debe, principal, mas no únicamente, a que los españoles consideraron las conquistas su victoria definitiva y siguieron viviendo en este engaño. Las coronas aledañas aprovecharon este error para fortalecerse, mientas que España se dedicó a vivir en el derroche. Es a partir de que los españoles ven que sus modos de vida no pueden sustentarse -más porque ya están en el hoyo que porque de verdad lo hubieran notado- que comienza el Barroco español.
**Correciones por hacerse esta semana


